Todo un lujo: Mira cuántos millones vale el yate de Rafa Nadal

Mientras se aproxima al final de su carrera profesional, Rafael Nadal está aprovechando al máximo el tiempo libre.

Mientras se aproxima al final de su carrera profesional, Rafael Nadal está aprovechando al máximo el tiempo libre con su esposa, Mery Perelló, y su adorable hijo recién nacido, Rafael Jr. Una de las formas de demostrar esto se traduce en una fotografía que subió hace algunos años, donde presumía nada menos que a bordo de su impresionante yate en las aguas deslumbrantes de la costa griega.

Si bien Rafael Nadal normalmente mantiene su vida personal en privado, esta vez decidió darle un vistazo al mundo, compartiendo una foto encantadora con su esposa desde la cubierta de su espectacular embarcación. El yate que lleva a Nadal y su familia a estas aventuras es el 80 Sunreef Power Great White, que fue adquirido por el mallorquín en 2020.

El gasto de seis millones de euros es justificado con 24 metros de eslora y la capacidad para alojar a ocho pasajeros en cuatro camarotes increíblemente lujosos. Este yate es simplemente cuenta además con una suite principal que tiene todas las comodidades imaginables, desde un vestidor hasta un balcón privado para disfrutar de las vistas panorámicas del mar.

Pero la extravagancia del yate no se detiene ahí. El Great White cuenta con un salón espacioso que es un paraíso terrenal, equipado con dos enormes sofás, un comedor para ocho personas y no uno, sino dos televisores de 77 pulgadas para mantenerse al día con todo lo que pasa en el mundo.

En la cabina del yate, hay un espacio ideal para disfrutar de comidas al aire libre y protegerse del sol, además de una plataforma de baño hidráulica para darse un chapuzón refrescante en el mar. Sin lugar a dudas, Rafael Nadal tendrá con qué relajarse una vez decida colgar la raqueta de tenis.

¿Qué hace Rafael Nadal cuando no juega?

Por su profesión, Rafael Nadal ha estado muchos domingos de su vida jugando finales de torneos en virtud de su destacada trayectoria. Pero, ¿qué le gustaría o qué disfruta hacer los domingos que no juega? Ante la pregunta, respondió: “Por la mañana, jugar al golf con familiares y amigos. Luego una comida familiar y finalmente mirar fútbol por televisión. Compartir momentos con las personas que quiero y que me apetecen”.