Alerta en España: la peligrosa estafa de los códigos QR en los coches

La aparición de códigos QR en los parabrisas de los coches ha encendido las alarmas de los conductores en España.

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Por:

Adonis Martínez

Estafa de código QR
Nuevas estafas por código QR. Fuente: Producción en Canva PRO y La Península.

Las redes sociales suelen ser el escaparate de las nuevas formas de estafa que circulan, y los conductores no están exentos de ser el blanco de los delincuentes. Una de las más comunes es el phishing, una técnica que engaña a las víctimas llevándolas a páginas fraudulentas a través de enlaces en SMS o correos electrónicos para robar sus datos. Sin embargo, los estafadores han encontrado un nuevo formato para llevar a cabo este tipo de fraudes: los códigos QR.

Aunque llevan años en uso, los códigos QR han ganado popularidad en la era de los smartphones, gracias a su capacidad para almacenar información y ser fácilmente escaneados con una cámara. Esta evolución tecnológica, pensada para facilitar la vida cotidiana, se ha convertido en una herramienta más para los ciberdelincuentes, que aprovechan su aparente inocuidad para cometer delitos.

¿Qué es el Quishing?

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Los códigos QR llegaron a nuestras vidas para quedarse, pero debemos estar atentos ante estafas con estos. Fuente: Pexels

La popularidad de los códigos QR, utilizados para acceder rápidamente a enlaces, ha sido aprovechada por ciberdelincuentes a través del Quishing, una forma de phishing que utiliza códigos falsos para engañar a las víctimas. Estos códigos se colocan sobre otros legítimos o en lugares inesperados, como parabrisas de coches.

Al escanearlos, los usuarios son redirigidos a páginas falsas que imitan a las originales, donde se les solicitan datos personales o financieros, entregándolos sin sospechar que están siendo víctimas de un fraude. Este método, sencillo y efectivo, se basa en la confianza ciega que muchos tienen en esta tecnología.

Cómo detectar este tipo de estafas

Una de las primeras señales de alerta es la ubicación del código. Si se encuentra en un lugar poco habitual, como el parabrisas de un coche o pegado sobre otro código visible, puede ser un indicio de fraude. Examina detenidamente el código para ver si parece haber sido manipulado o sobrepuesto. Si notas irregularidades, evita escanearlo.

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Las estafas con QR falsos han proliferado, pero es posible no caer en el engaño. Fuente: Canva - La Península

Además, es fundamental prestar atención al enlace al que te redirige el código QR. Siempre verifica la URL antes de interactuar con la página web. Si la dirección parece sospechosa o no coincide con el sitio legítimo, no introduzcas datos personales ni financieros. Para mayor seguridad, utiliza aplicaciones de lectura de QR que permitan previsualizar el enlace antes de abrirlo, y nunca accedas a códigos en lugares públicos sin verificar su autenticidad. La prevención es la mejor herramienta contra estas estafas.

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