¿En qué caso se puede embargar una pensión en España y de cuánto es el tope de embargo?

Aunque las pensiones cuentan con protección legal frente a embargos, no están totalmente exentas. Conocer los límites y derechos puede ser fundamental para quienes enfrentan dificultades económicas.

En España, aunque las pensiones son una fuente de ingresos esencial para millones de personas, en determinadas circunstancias pueden ser embargadas.

El embargo de una pensión se produce cuando existe una deuda que no ha sido saldada, ya sea con una entidad financiera, una empresa o con la Administración Pública, como en el caso de impagos a Hacienda o a la Seguridad Social.

La Ley de Enjuiciamiento Civil establece que las pensiones contributivas pueden ser embargadas, pero no en su totalidad. El importe equivalente al salario mínimo interprofesional está protegido y no puede ser embargado.

En 2025, el SMI en España se sitúa en 1.184 euros mensuales en 14 pagas. Por tanto, cualquier cantidad que supere ese importe sí podrá ser objeto de embargo.

¿De cuánto puede ser el embargo?

Solo si la pensión supera el salario mínimo, se podrá embargar el excedente, aplicando la siguiente escala:

• 30% para la cantidad adicional hasta el doble del SMI.
• 50% para la cantidad adicional hasta el triple del SMI.
• 60% para la cantidad adicional hasta el cuádruple del SMI.
• 75% para la cantidad adicional hasta el quíntuple del SMI.
• 90% para cualquier cantidad que exceda del quíntuple del SMI.

Hay situaciones especiales en las que las normas de protección del SMI no se aplican. En casos de deudas por pensiones alimenticias o cobros indebidos, se puede embargar entre el 10% y el 30% de la pensión, según el importe que perciba el pensionista.

En definitiva, aunque las pensiones contributivas cuentan con una importante protección legal frente a embargos, existen circunstancias específicas en las que sí pueden ser afectadas.

Por ello, es fundamental conocer los límites y excepciones para poder defender correctamente los derechos de los pensionistas.