Así es Guadalupe, el pueblo de importancia histórica para los reyes Felipe VI y Letizia

Las figuras principales de la realeza española visitaron esta ciudad y recordaron su importancia para la corona.

Por:

Nicolas Esteban Lafferriere

Este miércoles, el Rey Felipe VI de España y su esposa, la Reina Letizia Ortiz, han regresado a Guadalupe como parte de los actos conmemorativos del décimo aniversario de la proclamación del monarca. Se trata de un pueblo con una importancia a nivel histórico y personal para la realeza española.

Las cabezas de la Casa Real han protagoniza emotiva jornada, cogida con entusiasmo por los vecinos del municipio. Una gran cantidad de súbditos han salido a las calles con el fin de tener unos breves segundos de encuentro con la pareja real en uno de los enclaves más emblemáticos de Extremadura.

Y es que se trata de un municipio que ha marcado una gran importancia para la corona española. Felipe VI y Letizia han compartido una historia llamativa como reyes en Guadalupe, un sector muy citado por su influencia religiosa dentro de España.

Así es Guadalupe por dentro

Hablamos de un municipio en la provincia de Cáceres con 1752 habitantes (según el último dato del INE de 2018). Este pequeño sector se ha convertido en el centro de peregrinación más importante de la península ibérica después de Santiago de Compostela, condición que mantiene en la actualidad a través de la peregrinación que llega de toda España por los caminos de Guadalupe

Guadalupe, con su legado religioso y artístico que se remonta al siglo XIII, se ha consolidado como símbolo de la identidad cultural extremeña. La imagen de la Virgen de Guadalupe, patrona de la región y Reina de la Hispanidad, ha sido también parte del recorrido de los monarcas, que han visitado su camarín y han descendido la escalinata del monasterio entre vítores.

La importancia de Guadalupe en la realeza

Con esta visita, los reyes han reafirmado su vínculo con Guadalupe, a donde ya habían acudido poco después de su boda en 2004. Una jornada en la que tradición, historia y cercanía han convergido para dejar un recuerdo imborrable tanto en la comunidad como en la propia casa real.