Expertos de Harvard encontraron la solución para evitar que los perros muerdan a las personas

Un estudio demostró cuál es la solución para que los perros no muerdan a las personas. Conoce de qué se trata en esta nota.

Un reciente artículo publicado por la prestigiosa Universidad de Harvard destaca las estrategias más efectivas para prevenir las mordeduras de perros, un tema de gran relevancia entre las familias que buscan evitar situaciones complejas y dolorosas tanto para las personas como para los animales.

Según la Asociación Estadounidense de Medicina Veterinaria (AVMA), las mordeduras de perros suelen ocurrir accidentalmente durante actividades lúdicas entre los dueños y sus mascotas, pero la mayoría de estos incidentes tienen su origen en el estrés o el miedo que sienten los animales.

La solución para evitar que los perros muertan a las personas

Entre las recomendaciones prácticas que brinda Harvard para evitar mordeduras se encuentran: consultar siempre al dueño antes de acariciar a un perro, incluso si parece amigable; asegurarse de que el perro te vea, te olfatee y te reconozca antes de acercarte para acariciarlo; evitar acariciar a un perro que parezca aislado, asustado, enfermo o lastimado; y mantener la calma y evitar el contacto visual directo si se acerca un perro desconocido, posicionándose de lado y utilizando un tono de voz decidido para alejarlo.

Por ello, Harvard destaca la importancia de socializar a los perros desde temprana edad para reducir la agresión y la ansiedad en los animales, además de brindarles un entrenamiento en obediencia básica que fortalece su relación con los humanos. También es esencial aprender a identificar las señales que indican que un perro puede estar experimentando malestar, estrés o irritación, como gruñidos, mostrar los dientes o una postura corporal rígida, y retirarse ante estas señales para evitar cualquier conflicto.

En casos de perros con problemas de agresividad o miedo, se recomienda buscar la ayuda de profesionales en comportamiento canino, y nunca dejar a los niños solos con perros potencialmente agresivos. Es importante comprender las razones por las cuales los perros pueden morder, ya sea por miedo, dolor, defensa territorial, falta de socialización o durante el juego, para tomar medidas preventivas que aseguren una convivencia armoniosa y segura entre los humanos y sus fieles compañeros caninos.

Harvard enfatiza la importancia de educar a las personas sobre cómo interactuar adecuadamente con los perros, especialmente a los niños. Enseñarles desde temprana edad a respetar el espacio y las señales de los animales puede prevenir situaciones peligrosas. Los padres y cuidadores deben supervisar de cerca las interacciones entre niños y perros, fomentando el respeto mutuo y la comprensión de los límites de cada uno.