Juegos Olímpicos: los bizarros deportes que fueron parte de la competencia

Repasamos siete disciplinas ridículas que llegaron a integrar alguna edición de la fiesta deportiva.

Por:

Nicolas Lafferriere

Al tratarse de un evento con más de un siglo de existencia, los Juegos Olímpicos se han visto obligados a adaptar su concepto deportivo a través de un contexto temporal con todo tipo de cambios y etapas. Esto provocó que varias disciplinas extrañas hayan sido parte de este evento a pesar de no ser considerados como deportes olímpicos en la actualidad.

En este artículo, repasamos siete disciplinas que llegaron a tener una fase de prueba, e incluso entraron de forma oficial, en alguna edición de los Juegos Olímpicos.

Bowling

Empezamos con un caso debatible. Los bolos podrán ser una actividad de alto valor competitivo, pero como deporte olímpico no pasaron de una única prueba. Seúl 1988 tuvo el único torneo de bowling olímpico, con 12 hombres y 12 mujeres de 21 países en competencia. Filipinas y Corea del Sur se llevaron el oro femenino y masculino respectivamente, y la disciplina fue rechazada por la poca accesibilidad entre deportistas jóvenes y países tercermundistas.

Natación de Marineros

Atenas 1896 marcó la primera edición moderna de los Juegos Olímpicos, y con ello tuvimos la versión preliminar de múltiples deportes que hoy son clásicos de este evento. Si bien la natación no es extraña como disciplina, una categoría dedicada a un grupo tan específico como la Armada Griega llama demasiado la atención como para no incluirla en esta lista. Por obvias razones, el COI no volvió a permitir otra categoría centrada en participantes de un mismo país.

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Wushu

En los controversiales juegos de Berlín 1936, se realizó una breve demostración de una disciplina que combinaba varias artes marciales chinas. El Wushu tardó más de siete décadas en ser considerado como un posible deporte olímpico, pero su inclusión en Beijing 2008 no es considerada como oficial por el COI. Aun con esas, las categorías de esta disciplina fueron ocupadas por atletas de 43 países, un logro inusual para un deporte tan local.

Lanzamiento de Mazas

Aquí trazamos una línea donde empiezan las disciplinas difíciles de defender. Un ejercicio de gimnasia tan sencillo como el balanceo de peso llegó a convertirse en un deporte reconocido durante los Juegos Olímpicos de Los Angeles 1932. El fracaso de esta categoría de atletismo fue premeditado. Solo cuatro personas de dos países llegaron a inscribirse, y los tres medallistas fueron todos estadounidenses. El mexicano solo se llevó el diploma de mérito de un deporte que no fue tal.

Duelo de Pistolas

Así como leíste: el método utilizado por la nobleza para resover conflictos tuvo su variante olímpica. Con pruebas en los Juegos Intercalados de 1906 y los Olímpicos de Londres 1908, el duelo de pistolas consistía en dos hombres con protección blindada y casco que tomaban distancia a espaldas antes de disparar a su rival. Las balas de cera no se cobraron ninguna víctima fatal, pero fue difícil encontrar un motivo para que esta disciplina siguiera vigente en la actualidad.

Bikepolo

El polo en bicicleta es uno de esos deportes extraños que llega a los medios cada cierto tiempo. Igualmente, esta variante tuvo la oportunidad de entrar a la lista de disciplinas oficiales cuando fue elegida para una prueba durante Londres 1908. El programa del evento incluía un único partido entre Inglaterra y Alemania, el cual llevó a los primeros a la victoria por 3 a 1. Quizás fue la desorganización lo que llevó a este deporte al fracaso, ya que se reportó una diferencia numérica que debió favorecer a los alemanes.

Competencia de Arte

No, no estamos hablando de Gimnasia Artística, sino de una serie de disciplinas que engloban aptitudes como arquitectura, literatura, música, escultura y arte gráfico. Por extraño que parezca, las competencias olímpicas de arte ocuparon un trecho bastante importante en la historia del evento. Entre Estocolmo 1912 y Londres 1948, el COI entregaba medallas a los mejores escultores, poetas y dibujantes del mundo. Fue en 1949 cuando optaron por separar el arte del deporte, dejando atrás una serie de disciplinas que a día de hoy desentonarían dentro de los Juegos Olímpicos.