Esta película de Netflix ya nos habló de la psicosis que podría causar un apagón

Protagonizada por Julia Roberts, Ethan Hawke y Mahersala Ali, es una de las mejores películas sobre el tema.

Por:

Adonis Martínez

Sin previo aviso, a mediodía del lunes 28 de abril, España quedó a oscuras. No fue un fallo aislado ni una simple avería: el suministro eléctrico cayó en todo el país, sumiendo a millones de personas en una parálisis inesperada. Las ciudades se ralentizaron, los comercios cerraron y la vida cotidiana quedó en suspenso durante más de cuatro horas.

La desconexión fue total. Sin internet, sin señal en los móviles y sin la ayuda de ningún dispositivo electrónico, la sensación de aislamiento se extendió como un eco silencioso por cada rincón del país. Lo que parecía un escenario reservado a películas de catástrofes, se materializó en cuestión de minutos.

El episodio no pudo evitar recordar a Leave the World Behind, el thriller de Netflix en el que Julia Roberts, Ethan Hawke, Kevin Bacon y Mahershala Ali enfrentan el colapso tecnológico de un mundo moderno. Esta vez, sin embargo, el apagón no era ficción: era el reflejo de una vulnerabilidad real.

¿De qué trata Dejar el mundo atrás?

Dejar el mundo atrás no es solo el título de una película, sino también la sensación que vivieron muchos españoles durante el gran apagón. Este largometraje cuenta cómo unas vacaciones tranquilas en Long Island se ven truncadas por la llegada de desconocidos que anuncian un fallo masivo. Sin internet, sin información y sin entender lo que ocurre, los protagonistas deben adaptarse a un mundo que se desmorona ante sus ojos.

La trama suena inquietantemente cercana. Porque más allá de la ficción, en esta semana de abril, muchas familias en la Península Ibérica experimentaron algo similar. Hogares sin electricidad, calles a oscuras y la incertidumbre de no saber qué vendría después, mientras las horas pasaban y la luz no volvía.

El apagón dejó a millones de personas en un escenario que hasta entonces solo parecía posible en una pantalla. Un recordatorio de lo frágil que puede ser nuestro estilo de vida cuando la tecnología, de repente, deja de acompañarnos.

Qué hacer en una situación de este tipo

Cuando ocurre un apagón masivo, lo más importante es mantener la calma y actuar con lógica. Desconecta los electrodomésticos para evitar daños cuando vuelva la luz, utiliza linternas en lugar de velas para evitar incendios y conserva la batería del móvil solo para lo esencial. Si no tienes cobertura, intenta contactar con vecinos o acude a un punto elevado donde puedas recuperar señal.

Evita usar ascensores, mantente informado por radio si es posible, y, sobre todo, sigue las indicaciones de las autoridades. Estos cortes pueden durar horas, así que es recomendable tener siempre en casa una pequeña reserva de agua, alimentos no perecederos, una radio portátil y una linterna con pilas. Porque cuando la tecnología falla, la preparación marca la diferencia.