Un coche de policía atropella a tres mujeres y un bebé en Madrid

El coche patrulla avanzaba con las sirenas y luces activadas, pero otro vehículo se interpuso en su camino, acabando sobre la acera.

Por:

Adonis Martínez

Tres mujeres y un bebé resultaron heridos este domingo por la tarde tras ser atropellados por un vehículo de la Policía Nacional en pleno centro de Madrid. Una de las mujeres sufrió heridas graves, mientras que la madre del bebé y la otra mujer se encuentran en estado menos grave y leve, respectivamente.

El bebé fue trasladado a un hospital con pronóstico reservado. Al lugar acudieron equipos de emergencia del Samur-Protección Civil, que también asistieron a la abuela del menor, afectada por una crisis de ansiedad.

Una maniobra debido a un servicio urgente

El incidente ocurrió alrededor de las 16:00 horas en la intersección de las calles Narváez y Alcalá. Según fuentes policiales, la patrulla se dirigía a apoyar a otros agentes que estaban intentando detener a un hombre con comportamiento agresivo.

El coche de la Policía llevaba activadas las sirenas y las luces de emergencia cuando un conductor, aparentemente sin intención, se interpuso en su trayectoria. Esto obligó al coche policial a maniobrar bruscamente, lo que provocó que terminara subiéndose a la acera y ocasionando el accidente.

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La víctima más grave, una mujer de 47 años, ha sufrido graves lesiones en un pie, descrito como “en estado catastrófico”, y ha sido ingresada en el Hospital de La Paz. Otra mujer, de 34 años, presenta una fractura de fémur y diversas contusiones, por lo que fue trasladada al Hospital 12 de Octubre con un pronóstico menos grave.

La tercera mujer sufrió una herida en la pierna y fue llevada al Hospital Gregorio Marañón, encontrándose en estado leve. El bebé, de poco más de un año, tiene un traumatismo craneoencefálico y lesiones faciales, siendo ingresado en el Hospital Niño Jesús con pronóstico reservado, a la espera de evaluar la gravedad del golpe en la cabeza.

El agente, un veterano de 15 años

“Prefiero que me disparen antes que hacer daño a personas inocentes”, repetía una y otra vez el policía que conducía el coche patrulla involucrado en el atropello ocurrido el domingo en la calle Narváez, en Madrid.

El agente, un veterano con más de 15 años de servicio en las calles de Madrid, está “destrozado”, según relatan sus compañeros. “No dejaba de decir que, por primera vez en su carrera, sentía que había fallado a los ciudadanos. Insistía en que preferiría haber recibido un disparo antes que herir a inocentes”, relatan.