Policía Nacional detiene a un hombre por grabar a mujeres en el Metro

El hombre ha quedado acusado de delito contra la intimidad por estos actos. ¿Qué sucederá con él?

Por:

Adonis Martínez

La tranquilidad de una tarde en Madrid se rompió cuando una patrulla de la Policía Nacional, que atendía una emergencia médica, descubrió algo que no esperaban. Un hombre de 73 años fue sorprendido in fraganti mientras grababa a mujeres en el Metro sin su permiso. Un acto inquietante que ha encendido todas las alarmas sobre la vulnerabilidad que enfrentan las mujeres en el transporte público.

No fue una operación planificada ni fruto de una investigación larga, sino un hallazgo casual que expuso un comportamiento grave y recurrente. Los agentes, mientras auxiliaban a un hombre en estado ebrio en la calle Arturo Soria, detectaron al sospechoso y acabaron encontrando pruebas de su actividad encubierta.

Este nuevo caso vuelve a poner sobre la mesa el debate sobre la privacidad en lugares públicos y la necesidad de reforzar los mecanismos de protección frente a quienes utilizan la tecnología para vulnerar derechos fundamentales. El Metro, un lugar de paso para miles de personas a diario, se ha convertido en escenario de un delito que no puede pasarse por alto.

Grababa a otras mujeres sin su consentimiento

Mientras la policía socorría al otro individuo, otro hombre los grababa sin su consentimiento, y eso bastó para que se acercaran a él y le recordaran que no está permitido grabar en la vía pública sin permiso, ni a ciudadanos ni a policías.

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Al pedirle la documentación, el hombre negó haber captado imágenes. Incluso accedió a mostrar su galería de fotos y vídeos para demostrarlo. Pero al revisar el contenido, los agentes descubrieron algo mucho más grave que una simple grabación en la calle.

Entre los archivos, hallaron un vídeo en el que el sospechoso colocaba el móvil dentro de una bolsa para grabar por debajo de la falda de una mujer en el Metro. En las imágenes se podía ver claramente su ropa interior, lo que dejó en evidencia una práctica completamente invasiva y delictiva, por la que fue inmediatamente detenido.

Detenido por delito contra la intimidad

Tras descubrir el vídeo comprometiendo la intimidad de una mujer, los agentes no dudaron en detener al hombre de 73 años en plena vía pública. Se le acusa de un presunto delito contra la intimidad, al haber grabado imágenes sin consentimiento que vulneran gravemente la privacidad de las víctimas.

La investigación no se ha quedado ahí. La Policía Nacional ha requisado su teléfono móvil y está analizando el contenido en busca de más pruebas que puedan confirmar si se trata de un hecho aislado o si existen más grabaciones similares.