Papa León XIV: ¿qué come y cómo se relaja en su tiempo libre?

Con motivo del estreno de un documental en Perú, personas cercanas al Papa León XIV revelan aspectos íntimos de su día a día antes del pontificado, desde sus platos favoritos hasta cómo disfrutaba de su tiempo libre.

Por:

Adonis Martínez

El reciente estreno de un documental en Perú ha vuelto a poner el foco en la figura del Papa León XIV, no solo como líder espiritual, sino como ser humano con una historia y costumbres propias. La producción, centrada en sus años previos al pontificado, ofrece un retrato íntimo que ha sorprendido a muchos por su calidez y sencillez.

Personas cercanas al pontífice han compartido anécdotas poco conocidas sobre su vida cotidiana antes de asumir el máximo cargo en la Iglesia. Desde sus comidas preferidas hasta las actividades con las que solía relajarse, el documental construye una imagen más cercana y terrenal del hoy líder del Vaticano.

Lejos de los protocolos y ceremonias, estos testimonios muestran a un hombre profundamente humano, con gustos sencillos y rutinas que reflejan una vida de humildad. Un perfil que ayuda a entender mejor su estilo pastoral y la conexión que ha logrado con fieles de todo el mundo.

Le encanta bailar, aunque dicen que no se le da muy bien

En las reuniones del barrio, cuando la música empezaba a sonar, Jorge —como lo conocían entonces sus amigos y vecinos, mucho antes de convertirse en el Papa León XIV— no se resistía a un buen baile. Aunque no era precisamente un experto en la pista, eso nunca lo detuvo. “Bailaba de todo. No sabía, pero igual se animaba. La pasábamos bonito”, recuerda con una sonrisa María, madre de uno de sus amigos más cercanos.

Te podría interesar

¿Vuelve la misa en latín? El Papa León XIV busca reconciliarse con los tradicionalistas

Para quienes compartieron aquellos momentos, Jorge era un joven alegre, sencillo y siempre dispuesto a integrarse. No importaban los pasos ni el ritmo, lo que contagiaba era su entusiasmo y la manera en que se entregaba al momento. Su forma de bailar, desinhibida y auténtica, se convirtió en un símbolo de su cercanía con la gente.

Ese recuerdo permanece vivo entre quienes lo vieron crecer. El ahora pontífice, tan acostumbrado hoy a los protocolos del Vaticano, era entonces un chico de barrio que disfrutaba con intensidad cada instante. “Se le notaba que lo disfrutaba de verdad, como si en esos momentos se olvidara de todo”, concluye María, entre risas y un toque de nostalgia.

Y su comida favorita es. . No hay sorpresa

El ceviche ocupaba un lugar especial en sus preferencias. Según contó María Yopla a RPP, era un plato imprescindible en sus comidas, sobre todo cuando se trataba de momentos compartidos con su círculo más cercano. “Era imprescindible”, afirmó, dejando claro que no se trataba solo de una costumbre, sino de un verdadero gusto por los sabores del Perú.

Aunque era una persona sencilla y reservada, disfrutaba con entusiasmo de la gastronomía local. La causa limeña y el shambar también estaban entre sus favoritos, pero era el ceviche el que siempre destacaba en la mesa. “Comía de todo, pero lo que le agradaba, aún más”, comentó María, resaltando esa mezcla de humildad y buen paladar que lo hacía cercano a todos.