Evita problemas de salud y nunca congeles estos alimentos

Hay alimentos que pierden sus propiedades nutricionales o entran en estado de descomposición, ten en cuenta esto para que no te suceda.

Por:

José Banco

Lo bueno de congelar algunas comidas es que se mantienen protegidas de cualquier microorganismo. Para eso, es importante que los productos se encuentren en una temperatura de -18°C y, además, saber cuál es el mejor método para descongelarlo y evitar que este se desperdicie o pierda su sabor o textura.

Se pueden congelar casi todos los alimentos, aunque algunos son más adecuados que otros. Todos los alimentos pierden sabor, textura y aroma con el tiempo, pero la forma en que el agua se convierte en hielo determina en gran medida lo que conviene congelar. Por ejemplo, cuando los ingredientes frescos con mucha agua se congelan, sus paredes celulares se rompen, alterando su textura. Por eso, no se recomienda congelar alimentos con mucha grasa o fritos, salsas con almidón o nata, mayonesas, lechugas, tomates, patatas, endibia, pepinos, apio, aguacate o champiñones, porque pierden parte de su textura y pueden cambiar su sabor.

Alimentos que no debes congelar

· Papa: si guardas en el freezer esta verdura, al momento de utilizarla te quedará un alimento totalmente granulado. Para evitar esto es necesario cocinar en agua hirviendo con sal durante 5 minutos y luego recién puedes congelarla.

· Hortalizas: lechugas, espinacas, berros y demás hierbas son alimentos que tienen en su composición un aproximado del 70% de agua y es por eso que si se congelan, todas sus hojas tienden a marchitarse.

Te podría interesar

La ciencia confirma el truco para evitar que la olla hirviendo desborde

Por qué retiraron del mercado en España este probiótico y que consecuencias tenía para los niños

· Frutas: por un lado, la sandía y el melón son dos frutas con un alto índice de agua en su composición, por eso es importante evitar congelarse porque afecta por completo su capacidad nutricional. Por su parte, las manzanas y las bananas entran en proceso de oxidación si se las guarda en el freezer. Solo se recomienda hacerlo para usar los azúcares concentrados en recetas como el pan de banana.

· Huevos: no se recomienda congelar un huevo crudo, ya que es muy probable que explote o después de descongelado haya perdido su utilidad.

· Mayonesa u otros aderezos: si mandas al freezer un paquete de mayonesa, la combinación de la grasa y el agua hará que la misma entre en proceso de descomposición, por lo que se echará a perder.

Los alimentos que se pueden congelar

· Carnes y pescados: pollo, carne de res, cerdo, cordero, pescado y mariscos se pueden congelar crudos o cocidos sin ningún problema.

Te recomendamos

La ciencia confirma el truco para evitar que la olla hirviendo desborde

Por qué retiraron del mercado en España este probiótico y que consecuencias tenía para los niños

· Panes y productos horneados: los panes, las tortillas, las galletas y las tortas se pueden congelar enteros o en porciones.

· Platos elaborados: sopas, guisos, lasañas, salsas y otros platos cocidos se pueden congelar en porciones.

· Legumbres cocidas: lentejas, porotos, garbanzos, etc., una vez cocidos, se pueden congelar para usarlos en otros platos.

Cómo descongelar un alimento de forma correcta:

· En la heladera: cambiar de lugar el alimento congelado del freezer a la heladera y dejarlo descongelar durante varias horas o durante la noche, es la opción más segura. Así, se mantiene el alimento a una temperatura segura mientras se descongela.

· En agua fría: hay que colocar el alimento en una bolsa hermética y sumergirlo en un recipiente con agua fría, que se debe cambiar cada 30 minutos para mantenerla a esa temperatura.

· En el microondas: es la mejor opción para descongelar algo rápido. Usar la función de descongelar del microondas, pero ten cuidado de no cocinar accidentalmente el alimento. Luego, se debe cocinar inmediatamente.

Es importante evitar descongelar alimentos o ingredientes a temperatura ambiente o en agua caliente, ya que esto puede aumentar el riesgo de proliferación de bacterias.