Día del Gamer 2024: Estos son los beneficios de los videojuegos para el aprendizaje

Los videojuegos han sido herramientas muy valoradas para mejorar habilidades personales. ¿Qué beneficios tienen?

Por:

Nicolas Esteban Lafferriere

En el transcurso de la historia, los videojuegos han sido tan aplaudidos como criticados por sus efectos en las personas. Dejando atrás las opiniones sensacionalistas y anticuadas hacia este medio de entretenimiento, lo cierto es que existen razones para darles crédito por potenciar el aprendizaje de los jóvenes en varias disciplinas.

Los videojuegos y el aprendizaje

El concepto de game-based learning, que se enfoca en la enseñanza a través del entretenimiento electrónico, ha sido muy esparcido en los últimos años. Este método educativo utiliza los aspectos más positivos de los videojuegos para transmitir conocimientos a los estudiantes.

Una de las ventajas de los videojuegos como herramienta de aprendizaje es el dinamismo que ofrece a la educación, convirtiéndola en un juego divertido, emocionante y sin obligar a una persona a escuchar una lección verbal. Esto hace que los alumnos asimilen y retengan los contenidos casi sin darse cuenta.

Además, el entretenimiento electrónico incrementa la motivación de los estudiantes, al convertirlos en protagonistas de una historia y premiando su esfuerzo con medallas, vidas extra, bonus, etc.. Los videojuegos también permiten aplicar los conocimientos adquiridos sin crear situaciones de peligro. Este es el cometido, por ejemplo, de los simuladores de aviación y navegación.

Los beneficios de jugar videojuegos

A pesar de tener desventajas como el gaming disorder, reconocido por la ONU en 2019, lo cierto es que las personas que juegan videojuegos de forma constante han presentado ventajas en sus habilidades interpersonales que resultan útiles en su día a día.

Las ventajas de jugar videojuegos son:

• Mejorar la capacidad de respuesta a la hora de lidiar con imprevistos, planteando problemas y estableciendo un tiempo límite para resolverlos.
• Fomentar el trabajo en equipo en el día a día, de la misma forma que lo harían con las partidas de varios jugadores con un objetivo común.
• Estimular la creatividad, la atención y la memoria visual, gracias a juegos que obligan a concentrarse, a usar la imaginación y a recordar los detalles para resolver desafíos.
• Mejorar la estrategia y el liderazgo al colocarte en situaciones de mando, mejorando así la capacidad para resolver conflictos, dirigir a otros personajes y tomar decisiones.
• Enseñar idiomas a través del entendimiento de instrucciones en pantalla, chats para comunicarse con otros jugadores, o la propia narración de la historia.
• Favorecer el pensamiento crítico al ejercitar valores éticos, filosóficos y sociales, además de hacerlos reflexionar alrededor de sus historias.