Humo blanco: cuál es la primera decisión que debe tomar el nuevo papa

El nuevo Papa, elegido tras cuatro votaciones que otorgaron 89 votos de los 133 cardenales, inicia su pontificado con ritos tradicionales.

Por:

Alexis Montiveros

Desde el instante en que la fumata blanca se alzó sobre la Capilla Sixtina, millones de fieles y curiosos supieron que el proceso de elección había concluido con éxito. El nuevo Papa, elegido tras cuatro votaciones que otorgaron 89 votos de los 133 cardenales, inicia su pontificado con una serie de ritos que marcan tanto la formalidad del rito como el estilo que imprimirá a su papado.

En cumplimiento de las costumbres establecidas por San Juan Pablo II en 1996, el recién nombrado Papa debe afrontar de inmediato la primera y decisiva tradición que determinará el tono de su mandato.

¿Cuál es la primera decisión que debe tomar el nuevo Papa?

El primer paso tras la fumata blanca es la aceptación formal de su elección. El cardenal presidente del cónclave le pregunta en latín si acepta el cargo, y solo con un “acepto” o su equivalente en latín queda configurado el vínculo canónico que legitima su pontificado.

¿Qué nombre escogió para su pontificado?

Acto seguido, se le inquiere sobre el nombre pontifical que desea adoptar. Esta decisión va más allá de una simple etiqueta: el nombre refleja la inspiración espiritual y el mensaje que el Papa quiere transmitir. Algunos pontífices honran a predecesores admirados, mientras que otros, como Francisco, comienzan nuevas tradiciones con su elección.

Te podría interesar

Habemus papam: la reacción en las redes tras el humo blanco que confirmó un nuevo papa

¿Cómo se formaliza la lealtad de los cardenales?

Con el nombre ya anunciado, los 132 cardenales electores se reúnen en procesión frente al atrio de la Capilla Sixtina para expresar su lealtad y apoyo al nuevo Sumo Pontífice. Esta aclamación conjunta simboliza la unidad de la Iglesia tras el cónclave.

¿Qué ocurre en la “Sala de las Lágrimas”?

A continuación, el Papa se dirige a la sacristía conocida como Sala de las Lágrimas, donde se le presentan tres tallas de la vestidura papal (pequeña, mediana y grande). Allí, ajusta su sotana, muceta y estola, completando así su imagen litúrgica para la primera aparición oficial.

¿Qué detalles de estilo observa la Santa Sede?

Los vaticanistas y los fieles atentos examinan cada elemento de la indumentaria papal. Se espera saber si retomará la mozzetta, como hizo Benedicto XVI, o si prescindirá de ella siguiendo el ejemplo de Francisco. Cada decisión en el vestuario servirá de pista sobre la estética y el enfoque pastoral de su pontificado.