El truco de la abuela para que ninguna polilla entre en tu casa este verano

Uno de los insectos más grandes que pueden entrar en tu casa, dan miedo, pero eso se acabó gracias a este truco.

Las polillas pueden parecer inofensivas, pero cuando invaden nuestros armarios o la despensa, el daño que provocan es más que evidente. Ropa con agujeros, alimentos contaminados y textiles arruinados son algunas de las consecuencias de su presencia, especialmente por culpa de sus larvas, que actúan sin ser vistas hasta que ya es tarde.

Por suerte, no hace falta recurrir a insecticidas ni productos agresivos para mantenerlas a raya. Existen soluciones naturales igual de eficaces, y lo mejor es que puedes prepararlas tú mismo en casa con ingredientes básicos y al alcance de cualquiera.

Una de las más populares en redes sociales la comparte Andrea, conocida como @limpiaterapia_con_andrea, experta en limpieza que apuesta por métodos caseros, ecológicos y seguros. Su truco no solo es fácil de hacer, sino que además resulta ideal para quienes conviven con niños o mascotas y quieren mantener su hogar libre de tóxicos sin renunciar a la eficacia.

Adiós polillas, en mi casa no

Aunque a menudo pasen desapercibidas, las polillas pueden convertirse en un auténtico quebradero de cabeza si no se actúa a tiempo. El verdadero problema no son los adultos revoloteando junto a las lámparas, sino los huevos que depositan y, sobre todo, las larvas que nacen de ellos. Estas pequeñas invasoras son capaces de destruir tejidos naturales como lana, algodón o seda, e incluso pueden colarse en la despensa y atacar alimentos.

La clave para evitar que el problema se agrave es actuar con rapidez. No basta con matar a las polillas visibles; es fundamental eliminar también huevos y larvas, que suelen esconderse en rincones difíciles de alcanzar. En este punto, los métodos naturales pueden ser tan efectivos como los químicos, pero mucho más seguros para el hogar.

Un primer paso imprescindible es realizar una limpieza profunda en armarios, cajones o estanterías afectadas. Utilizar una mezcla de agua con vinagre blanco ayuda a desinfectar y a repeler los insectos de forma natural. Además de eliminar restos invisibles, el vinagre deja un olor desagradable para las polillas, reforzando la protección sin dañar superficies ni textiles.

El truco tiene su miga, o vinagre

Para reforzar el efecto antiplagas, puedes complementar el truco con hierbas aromáticas como lavanda, romero o eucalipto. Estas plantas, además de perfumar de forma natural, ayudan a mantener a raya a las polillas. Si no las tienes frescas, los aceites esenciales también funcionan.

Basta con empapar un algodón en el aceite y colocarlo dentro de la bolsita con cáscaras cítricas. El resultado es un repelente casero que, además de eficaz, deja un aroma fresco y agradable en armarios y cajones.

Se recomienda repetir el proceso con cada cambio de estación y colocar las bolsitas en puntos clave del hogar. Así tendrás una barrera natural que protege tu ropa y alimentos sin usar químicos.