La Psicología responde: ¿Por qué le tenemos miedo al compromiso?

En el ranking de los problemas que conlleva el amor, la postergación de un compromiso a largo plazo es de las cuestiones más recurrentes. ¿Por qué?

Por:

Cristian Ortega Mahan

En un mundo cada vez más digitalizado y marcado por el individualismo, el miedo al compromiso ha tomado un papel central en las relaciones humanas. Este fenómeno, según estudios psicológicos, no solo tiene raíces sociales, sino también mentales, y afecta tanto las relaciones amorosas como otros aspectos de la vida cotidiana.

Relaciones en la posmodernidad

Las relaciones actuales enfrentan retos distintos a los de generaciones pasadas. La aceleración social, los cambios culturales en torno a la familia y el predominio del individualismo han generado vínculos caracterizados por la incertidumbre. En este contexto, muchas personas sienten presión por encajar en un ideal de pareja, lo que lleva a construir imágenes propias para agradar y buscar en el otro cualidades específicas. Esta búsqueda constante suele terminar en la incapacidad de comprometerse al no encontrar a alguien que cumpla con listas minuciosas de expectativas.

El psicoanalista José Eduardo Abadi señala que el miedo al compromiso está estrechamente ligado al autoconocimiento y al tiempo que dedicamos a conocer a nuestra pareja. Según él, “el amor es el permiso de darse a conocer y conocer; no es un trabajo solo intelectual, sino afectivo, que nos permite estar verdaderamente al lado del otro”.

El peso de la era digital

Las redes sociales han potenciado la simulación y la superficialidad, dificultando la creación de vínculos auténticos. Según Abadi, abrirse a una relación requiere mostrar nuestra esencia más íntima, algo que puede generar temor. Este miedo a ser descubiertos tal como somos lleva a muchas personas a evitar comprometerse.

Además, en un mundo donde el amor es percibido como un sistema de producción y consumo, las relaciones se transforman en un intercambio de beneficios. Las personas buscan maximizar sus ganancias emocionales y preservar su libertad, evitando ceder demasiado en sus relaciones.

Compromiso más allá del amor

El miedo al compromiso no se limita a las relaciones amorosas. También se refleja en otros aspectos de la vida, como el ámbito laboral o las actividades diarias. Las personas que temen caer en la monotonía o el aburrimiento tienden a preferir experiencias breves y superficiales, evitando el esfuerzo que requiere profundizar en algo a largo plazo.

Abadi destaca que el compromiso es una elección que requiere trabajo constante para mantenerse. Sin embargo, el pensamiento a largo plazo suele asustar a quienes temen comprometerse, llevándolos a vivir en una constante indecisión.

Cómo superar el miedo al compromiso

No comprometerse puede perjudicar nuestras relaciones y limitar nuestra felicidad, ya que esta se alcanza, en gran parte, en relación con los demás.

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Abadi propone algunos pasos para enfrentar este miedo:

• Aprender a compartir y recibir del otro.
• Trabajar la confianza y la comunicación.
• Identificar las causas del miedo.
• Buscar ayuda profesional.
• Evitar la autocrítica excesiva y confiar en el proceso.

En un mundo dominado por el individualismo, aprender a comprometerse no solo mejora las relaciones personales, sino que también nos ayuda a crecer y encontrar plenitud en nuestras vidas.